jueves, 23 de diciembre de 2010

Pepino y Ekeko se van el mismo día

“Pepino bandido llegó tu hora. Ya no harás de las tuyas hasta el año que viene”. Frases como ésta se escucharon ayer en la plaza Murillo durante el entierro de este singular personaje. Con esta actividad se cierran las carnestolendas en La Paz. Pero el Pepino no fue el único despedido, en el Campo Ferial, donde se instaló la feria de la Alasita, los artesanos y el público despidieron al Ekeko con un remate de productos.
“Este año hemos tenido la compañía masiva de la gente”, señaló Jorge Arteaga director de la agrupación Los Olvidados, quien junto a 50 músicos acompañó al Pepino hasta su última morada. Previo a la presentación de Los Olvidados, la agrupación Recuerdos Vivos interpretó música de los años 40 y 50.

El entierro del Pepino se inició a las 10.30 y tuvo la presencia del oficial mayor de Culturas de la Alcaldía de La Paz, Wálter Gómez.

Tras las melodías de Achacacheña, los taquiraris de Gilberto Rojas y varios huayños interpretados por Los Olvidados, inició el cotejo fúnebre que despidió al Pepino. El ataúd con los restos de este personaje recorrió la plaza Murillo y la calle Comercio hasta llegar a la calle Genaro Sanjinés. “Pobre pepino, él era tan bueno”, lamentaba una de sus viudas.

Posteriormente, en la avenida Kollasuyo, inició la entrada de ch’utas y pepinos organizada por los vecinos de la zona El Tejar.

Cerca de las 15.30, el Campo Ferial, ubicado en la Avenida del Ejército, congregó a cientos de personas que visitaron el último día de la feria de la Alasita. “Siempre vengo el día del remate porque mis hijos se pueden llevar más cosas a la casa”, comentó Eugenia Millares.

Éste fue el primer año que los artesanos de la feria de la miniatura ocuparon el Campo Ferial. “Hemos adolecido de los servicios higiénicos. Para el próximo año se va a elaborar un plan de trabajo para organizar mejor a los artesanos y se va a hacer el respectivo reclamo a las autoridades de la Alcaldía”, señaló Samuel Callisaya, secretario de conflictos de la Federación Nacional de Artesanos y Expositores de Navidad y Alasita (Fenaena).

El dirigente añadió que para el próximo año se solicitará a las autoridades ediles que habiliten dos avenidas para que los artesanos instalen sus puestos.

El corso deja 93 detenidos

A pesar de las campañas preventivas que organizó la Policía cochabambina para el Corso de Corsos, se registraron 93 detenciones como producto de la fiesta carnavalera en la que 77 personas fueron detenidas en estado de ebriedad.

Según el coronel Carlos Quiroga, comandante departamental de la Policía, este año los casos atendidos se incrementaron en un dos por ciento en relación al 2009. “Se realizó el control pero con dificultades, se desplazó a más efectivos para evitar los excesos de los jóvenes”.

Entre los casos que resaltaron está la caída de una gradería, dos personas quedaron heridas.

De los 77 detenidos por protagonizar incidentes en estado de ebriedad y jugar agresivamente con agua está el caso de Bruno Quiroga Medinaceli (23), quien intentó mojar al presidente Evo Morales, “la oportuna intervención de la Policía Militar y el equipo de seguridad impidió la acción, fue detenido y puesto en libertad luego de las 8 horas de arresto, su familia firmó un acta de compromiso”.

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