La línea ya no desea que los Wachiturros vistan su ropa porque no se ajustan a sus estándares.
Lacoste es una firma que se ha caracterizado por conceder al atuendo deportivo una elegancia única. La marca se ha destacado por vestir a gente de estratos acomodados.
Las remeras del lagarto se cotizan, por lo bajo, a un precio de 500 dólares y no están al alcance de todo bolsillo. Cuando el grupo más popular de cumbia y hip hop argentino, Wachiturros, comenzó a hacer uso de sus famosas poleras Polo, la empresa se mostró descontenta y, por qué no decirlo, indignada. Si bien la agrupación de adolescentes contaba con recursos económicos suficientes para exponerla, debido a su reciente éxito y popularidad, la marca optó por discriminarla.
NO DAN LA TALLA
Según los parámetros de esta línea, los intérpretes de Tírate un paso para tras no son los clientes óptimos que buscan para lucir sus creaciones. Ya lo dice el famoso refrán: “aunque la mona se vista de seda, mona se queda”. Al parecer, Lacoste decidió tomarse al pie de la letra esta aseveración, al constatarla con el gesto de que no desea que su ropa la utilice cualquier “clase” de gente. Su condición social de chicos de las villas y los arrabales no les permite, si se quiere, acceder al estatus de Lacoste. No es la primera vez que sucede esto, ya que, según unoentrerios.com.ar, el diario argentino Clarín se habría referido despectivamente a los muchachos en noviembre de 2011, al apuntar que eran muy poca cosa para vestir una marca tan grande a escala mundial, con el titular: “Desafío para Lacoste: cómo ser top y a la vez vestir a los Wachiturros”.
EL DILEMA
Según el portal de noticias foros.riverplate.com, luego de un show en Río de La Plata, la agrupación confesó en una entrevista para el programa conducido por Pía Shaw, AM, que la marca estaba dispuesta a pagarles para que dejen de usar su ropa. Emmanuel, el líder, declaró: “No me parece bien que quieran pagarnos para que dejemos de usar su ropa”. Además, afirmó que pusieron la marca de moda entre los adolescentes. El productor de la banda, Javier Fernández, añadió, por su parte, que no hay “ningún acuerdo con Lacoste” y que la vio usarse muchísimo antes de la fama del grupo en zonas populares.
500 dólares, por lo bajo, costaría un producto de la reconocida marca, que tiene una imagen ideal de sus clientes.
1933 ese año fue fundada la marca de ropa Lacoste, por el reconocido tenista francés René Lacoste.
Moda, ¿una barrera cultural? La moda orienta el gusto de cada sociedad, según patrones de belleza, actitud y estética. Con este conflicto, se convierte en un barómetro de selección de las especies. No obstante, Nicolás Iglesias, director de Starway Marketing, declaró en el programa radial La Máquina de la Mañana que la exhibición del grupo no afectará el prestigio de la marca, según 26noticias.com.ar.
Lacoste es una firma que se ha caracterizado por conceder al atuendo deportivo una elegancia única. La marca se ha destacado por vestir a gente de estratos acomodados.
Las remeras del lagarto se cotizan, por lo bajo, a un precio de 500 dólares y no están al alcance de todo bolsillo. Cuando el grupo más popular de cumbia y hip hop argentino, Wachiturros, comenzó a hacer uso de sus famosas poleras Polo, la empresa se mostró descontenta y, por qué no decirlo, indignada. Si bien la agrupación de adolescentes contaba con recursos económicos suficientes para exponerla, debido a su reciente éxito y popularidad, la marca optó por discriminarla.
NO DAN LA TALLA
Según los parámetros de esta línea, los intérpretes de Tírate un paso para tras no son los clientes óptimos que buscan para lucir sus creaciones. Ya lo dice el famoso refrán: “aunque la mona se vista de seda, mona se queda”. Al parecer, Lacoste decidió tomarse al pie de la letra esta aseveración, al constatarla con el gesto de que no desea que su ropa la utilice cualquier “clase” de gente. Su condición social de chicos de las villas y los arrabales no les permite, si se quiere, acceder al estatus de Lacoste. No es la primera vez que sucede esto, ya que, según unoentrerios.com.ar, el diario argentino Clarín se habría referido despectivamente a los muchachos en noviembre de 2011, al apuntar que eran muy poca cosa para vestir una marca tan grande a escala mundial, con el titular: “Desafío para Lacoste: cómo ser top y a la vez vestir a los Wachiturros”.
EL DILEMA
Según el portal de noticias foros.riverplate.com, luego de un show en Río de La Plata, la agrupación confesó en una entrevista para el programa conducido por Pía Shaw, AM, que la marca estaba dispuesta a pagarles para que dejen de usar su ropa. Emmanuel, el líder, declaró: “No me parece bien que quieran pagarnos para que dejemos de usar su ropa”. Además, afirmó que pusieron la marca de moda entre los adolescentes. El productor de la banda, Javier Fernández, añadió, por su parte, que no hay “ningún acuerdo con Lacoste” y que la vio usarse muchísimo antes de la fama del grupo en zonas populares.
500 dólares, por lo bajo, costaría un producto de la reconocida marca, que tiene una imagen ideal de sus clientes.
1933 ese año fue fundada la marca de ropa Lacoste, por el reconocido tenista francés René Lacoste.
Moda, ¿una barrera cultural? La moda orienta el gusto de cada sociedad, según patrones de belleza, actitud y estética. Con este conflicto, se convierte en un barómetro de selección de las especies. No obstante, Nicolás Iglesias, director de Starway Marketing, declaró en el programa radial La Máquina de la Mañana que la exhibición del grupo no afectará el prestigio de la marca, según 26noticias.com.ar.
La Prensa
0 comentarios:
Publicar un comentario
Viva el Folklore de nuestra Bolivia, es muy importante tu comentario.